Delicioso vino mexicano: Barón Balch'é Reserva Especial


La bodega Barón Balch’é marcó un antes y después en la vitivinicultura mexicana al lanzar al mercado al inicio del siglo XXI vinos con la mayor aspiración posible en expresión del terruño, conocimiento en el quehacer enológico y calidad como un todo. Fundada en 1997 por la familia Ríos y contando con el apoyo del prestigiado enólogo Dr. Víctor Torres Alegre, doctor en enología por la Universidad de Burdeos en Francia, propusieron vinos de gran concentración aromática, equilibrio y expectativa de guarda.

Los precios de su gama premiun demostraron que había oportunidad en el mercado para estos tipos de vinos y pronto varias bodegas mexicanas se apresuraron a seguir sus pasos, aunque con resultados mixtos. Hoy día la enología en Barón Balch'é está a cargo de Jesús Rivera alumno del Dr. Víctor Torres, quién ha logrado mantener consistencia en el trabajo de la bodega y ha tenido oportunidad de abrir nuevas líneas de vinos ampliando el portafolio para incluir opciones para todo gusto y presupuesto.

Como dato curioso, el nombre de balch’é tiene origen en los rituales mayas en el sur de la península de Yucatán. Balch’é  es una bebida ceremonial que actualmente el grupo indígena chontal ofrece a la tierra, a los dueños de los montes y a los duendes como tributo a estas entidades, a quiénes atribuyen el cuidado de la milpa y animales domésticos. El balch’é consiste en un atole preparado con corteza fermentada de árbol endulzado con miel y anís.

A continuación, la recomendación de uno de los vinos mexicanos favoritos que destaca por su excelente relación precio calidad y la grata experiencia de beberlo.


Nombre del vino: Reserva Especial
Productor: Barón Balch’é
País: México
Región: Baja California, Valle de Guadalupe
Variedades de uva: Cabernet Franc, Merlot y Nebbiolo
Cosecha: 2007
Maduración:  14 meses en barricas y 6 meses en botella
Disponible en: Barón Balch’é Bajío / Contacto via email: bbalchedf@gmail.com. En México D.F. via Twitter con @BaronBalcheDF

Al servir el vino en copa se muestra de color rubí obscuro con un ribete ligeramente naranja. En nariz es un vino complejo que otorga diferentes familias aromáticas de gran atractivo, se recomienda trasvasar para su oxigenación previamente a ser servido (30 min a 1 hr). De gran potencia aromática, se perciben aromas de frutas rojas maduras que recuerdan la ciruela empezando ya su tránsito hacia las mermeladas. Después aparecen ricas notas de higo y ciruela pasificada para conjuntarse con las elegantes notas a hierbas finas como el romero y balsámicos, como la menta y el eucalipto. La maduración en barricas se manifiesta con ricos aromas a nuez y café tostado. Más adelante se perciben las notas minerales como el grafito y roca mojada que van cediendo el lugar a trazas aromáticas de hojarasca mojada y un poco de hongos. Realmente es un vino expresivo pero que requiere tiempo para ir desarrollando sus aromas. En boca, es un vino de ataque agradable, al inicio se percibe seco pero luego llega la acidez para impulsar esos aromas a frutas maduras y el recuerdo a café tostado con una presente tanicidad que muestra su carácter sobrio. También tiene esa nota en paladar de los vinos mexicanos de Baja California, pero muy ligera, justo lo necesario para presentarse con personalidad propia y orgullosa del terruño que le dio origen. De cuerpo medio, tiene un final largo que recuerda el caramelo tostado.

Un vino muy apropiado para acompañar diversos platillos de la cocina mexicana e internacional, con una complejidad interesante que definitivamente confirma su excelente relación precio-calidad. De inmediato llegan a la mente los quesos como manchego, edam, brie o ¿por qué no? queso provolone a la parrilla con aceite de oliva y este vino serán deliciosos maridajes. Ahora bien pensando en platos fuertes, los cortes de res con buen marmoleado o un poco de grasa irán muy bien a la corpulencia de este vino, chuletas de cordero a las hierbas finas o preparaciones que incluyan romero, harán un excelente maridaje de seguimiento. Si no se desea complicar tanto, unos buenos taquitos de arrachera marinada con huacamole serán el compañero ideal para este excelente vino mexicano.

Cierto es que ha habido un boom del vino mexicano en los últimos doce años más o menos, sin embargo la tarea ahora consiste en encontrar los vinos que poseen cualidades aromáticas y equilibrio en paladar, y si se puede en buena relación precio-calidad mejor. Este vino es uno de ellos y todo entusiasta del vino mexicano debería conocer y disfrutar este vino acompañando la comida con la familia, los amigos -y ahora que el clima mejore- sin duda será una botella en los asados en el jardín que todo invitado agradecerá.

¡Salud!
Dr. Salsa
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